dc.description.abstract | El tema que acaparó los titulares de la semana en la agenda de los medios fue, sin dudas, la presión ejercida por grupos financieros que poseen títulos públicos "defaulteados" y no aceptan la quita del 75% instrumentada sobre las acreencias privadas. El G7 solicitó que Argentina suba la oferta a los acreedores. Lavagna, en negociación con la cúpula del FMI insistió en que, aunque se encuentra dispuesto a escuchar, no se puede reducir la quita. A la medida de implementar mayores inhibiciones a bienes argentinos en EE.UU, Kirchner respondió ratificando el porcentaje de la quita al tiempo que Lavagna anunció la conformación del comité de bancos para renegociar la deuda. La reacción de los mercados a esta situación fue negativa: la bolsa local cayó 7.88% por las dudas de alcanzar un acuerdo con el FMI. Además, con relación a los pagos de marzo, en un nuevo gesto desafiante Kirchner declaró que si el FMI no asegura la aprobación de las metas, no se pagarán los 3100 millones de dólares. Sin embargo, el organismo insiste en que Argentina debe pagar. | es_ES |